Los ganadores de la mejor colección del Ego, American Pérez, ofrecieron un recorrido por el universo americano más profundo. El mundo rural marcó el punto de partida de una colección de espíritu girlie. El instituto es el leitmotiv de prendas de corte naïf que toman la silueta cheerleader y la maduran a través de los tejidos. Las icónicas chaquetas varsity se reinventan en versión femenina, y las transparencias se apoderan de las plisadas faldas de animadoras. Avanzando en la colección, aparecen alusiones a elementos raciales como abrigos con aplicaciones de pelo que recuerdan a los indígenas indios y jerséis multicolor de punto grueso que combinan la lana con el pelo de conejo. Edward Hopper inspira el universo cromático el dúo formado por Natalia Pérez y Jorge Bolado. Mostazas, celeste, castaños, rosa palo, cereza y beige componen una rica paleta cargada de romanticismo y encanto. Por Rocío Navarro.
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