AILANTO
Encontramos un poco de la languidez años 20's en los vestidos cocktail y otro tanto de la fluidez grecorromana de Madelaine Vionnet. También degustamos una pizca del discurso Oriente/Occidente y referencias a Bizancio, otro toque de Paul Poiret y numerosas alusiones a la estética geisha con vestidos de inspiración quimono y cinturones Obi.¿Los colores? lacado, carbón, plomo, estaño, grafito, perla, ébano, cobre, marfil y pinceladas de turquesa. Para aderezarlo todo con un poco de picante, añadimos una gota de fetish a base de total looks de cuero y… ¡Voilà! Ya tenemos el fantástico plato gourmet de Ailanto.
Victorio & Lucchino
La colorista propuesta incluye abrigos de encaje semitransparente a modo de veladuras y faldas de talle alto con cinturas elásticas que acentúan las formas de la cadera. Bolsillos xxl de pelo de zorro que sobresalen de los modelos con destellos tornasolados. Otro de los elementos que destaca en la colección es el efecto piel de melocotónque adquieren las prendas. A los pies, unas botas sesenteras de caña recta en piel de pitón.
Andrés Sardá
Berets garçon afrancesados, bustiers de encaje y pañuelos rouge anudados al cuello recrean una noche parisina de boudoir en elMoulin Rouge o el Crazy Horse. De los diseños flappers de las chicas can-can y sus exuberantes tocados de plumas pasamos a un momento torero más racial. Así, mantillas y peinetas nos acercan la imagen de una siniestra viuda negra, un modo a la española de ver a la femme fatale.
También admite vestidos de cuello halter –con Marilyn Monroe como punto de referencia– y combinaciones con microruffles que incorporan faldas tutú de estética bailarina.
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